martes, 17 de abril de 2012

COMENCEMOS HERMANOS...

DOMINGO 15
Todo lo que comienza bien, bien debe acabar…. Así la alegría del comienzo de este Capítulo de la Esteras, reencuentro feliz de muchos de los hermanos, encuentro de otros muchos que no se conocían, supone un feliz inicio: ¡cuánta alegría, que alborozo ver tantos hermanos que se quieren y se recuerdan!… Cuando este que lo cuenta llegó a El Escorial, un buen número de frailes ya había llegado y se estaba acomodando en el gran edificio que nos acoge… ¡Deberían dar mapa del sito!
Era media tarde, fría y, ya en la fila para registrarse, encontré una cara familiar que me parecía conocer, pero no me sonaba de esta película…  Caí en la cuenta que era Giacomo Bini haciendo cola con todos los demás… estremecedor…. ¡Algo verdaderamente está cambiando!

Presentes también en el evento hermanos venidos de las Provincias de Santiago, de Arantzazu y de Portugal, además de dos hermanas clarisas de Valencia que vinieron con nosotros . En total más de 120 asistentes.
La cena fue momento festivo  y de charla informal, poniéndonos al día de los casi 30 años pasados para algunos sin sentir… De allí rápidamente al salón de las reuniones para empezar a ponernos en marcha… Partía oficialmente la aventura:  el Capitulo de las Esteras de los hermanos franciscanos de España en proceso de unificación. Assabiya! Vaya usted a saber lo que es eso…
Nos hablo el Ministro de Valencia, José Antonio Jordá, al que se vio muy impuesto en procesos de revitalización. Nos animo a no quedarnos recostados en las poltronas – no muy cómodas – durante estos días, sino a tomar parte activa ya desde el principio… Por grupos, a continuación, empezaron a presentarse los grupos de hermanos participantes. El último grupo  en llegar, directamente de Asís, el de los estudiantes de Murcia con su maestro.

Tras el encuentro formal, el informal:  pasamos a degustar diversos productos típicos de todas las regiones que los hermanos han traído para endulzar el encuentro y compartir mientras charlamos todavía un rato. Y como en el Evangelio, y no precisamente por ser más pecadores, nos fuimos poco a poco retirando, empezando por los más viejos….
Ha sido un gran inicio… Y con este bello pensamiento me dormí….

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